sábado, 20 de noviembre de 2010

Cuentos de 3º grado

El capitán Cara de Pulpo

El capitán Cara de Pulpo fue un hombre lindo pero un día se cayó del barco en un lugar donde había un pulpo de 20 tentáculos y se le pegó en la cara. Los otros piratas lo vieron caer del barco y le querían sacar el pulpo de la cara al capitán Marilin Jason. No lo pudieron sacar entonces se quedó con él y los marineros lo llamaron Cara de Pulpo.
Él era muy feo, era como un alienigena. Era alto como una jirafa. Era tan flaco que se le veían las costillas y la barba eran los tentáculos.
Una noche de septiembre encontró una isla con tesoro y vio una luz que brillaba. Se fue hacia la luz y había dos sirenas.
El capitán se las llevó y ordenó que las tiraran a los tiburones porque eran malas y feas, pero una de las dos le mordió del cuello y... sangraron los tentáculos y se cayeron. 
El pulpo estaba a punto de morir y el capitán se puso triste porque se había convertido en su mejor amigo.
Fueron a la Isla del Terror. Ahí había un curandero que curaba pulpos, tiburones y peces de todas clases menos ballenas y tiburones ballena. Cara de Pulpo le dio el oro que se había encontrado en la isla de las sirenas y el curandero le dio un mapa para encontrar algas marinas para que se recuperara el pulpo.
Tuvieron que pasar muchas pruebas difíciles como el ahorcado, el duelo de marineros, pescar surubíes y pepinos de mar y jugar al chancho.
Al final pudieron sacar las algas marinas de abajo de una roca y consiguieron el antídoto para el Cara de Pulpo y se salvó por suerte, sino iba a morir y los amigos se iban a poner tristes.
Se fueron el capitán Marilin Jason, los marineros y el pulpo en el barco pirata Los siete Mares.


Las mejores amigas

Había una vez una nena que se llamaba Morena.
Sus amigos se llamaban Samyra, Agustín, Matías Thiago y Marianela.
Un día Morena llamó a sus amigas y amigos para jugar a la escondida.
Ese día sus amigos se enojaron porque era tramposa.
Pasaron dos días, Morena los fue a buscar y les dijo -no nos volvamos a pelear-.
Y vivieron felices por siempre.


El auto loco

Hace miles y miles de años corrió un auto muy pero muy loco en una pista con forma de ocho.
Él era el mejor auto furioso, el auto más querido de todo el país. 
Era el mejor corredor del mundo pero un día llegó el auto más pero más furioso y le dice: -¿Querés correr?
-Bueno dale. Mañana a las 20:50 hs.
-A cualquier hora.
-Dale
Llegó el día y la hora e iba a correr.
-Sí, vamos a correr a la cuenta de diez.
-One, two, three, four, five, six, seven eight, nine, ten, fuera.
Y a los 14:45 minutos llegó el auto loco y ganó la copa del mundo.


Brisa Nieves y el ogro

Había una vez una chica llamada Brisa Nieves que vivía en un palacio.
Un día se peleó con sus padres y se enojó muchísimo y les dijo -¡Me voy de esta casa! y Brisa Nieves empacó sus cosas: la ropa, sus zapatos rojos que tanto le gustaban y su oso de peluche y se fue.
Ella iba caminando y se perdió por el bosque y allí encontró una casa y golpeó la puerta y no la atendían. Entonces ella entró sin permiso y vio que estaba muy desordenada y se puso a limpiar porque era muy prolija. 
Abrió la ventana y justo pasaba una anciana y le dio una flor perfumada. La olió le dio mucho, mucho sueño. Entonces subió las escaleras y se acostó a dormir un rato hasta que vino el ogro y fue adonde estaba Brisa Nieves.
El ogro vio que estaba durmiendo y la despertó con una fuerte risa.
Ella se despertó y se enamoró y así vivieron ¡Felices por siempre!

El unicornio y el cíclope

El unicornio vivía en el bosque. El pelaje era moro y comía calabazas de la casa del cíclope.
El cíclope era muy alto y tenía la piel azul y un ojo negro. Sacaba pieles de los animales y se hacía ropa.
Un día el unicornio fue cerca de la casa del cíclope y lo quiso comer.
Pero un día muy soleado el unicornio iba muy distraído y lo atrapó el cíclope y lo llevó en una bolsa  a su casa para hacer asado. Cuando llegó a su casa y lo estaba por sacar de la bolsa le dio lástima comerlo y lo dejó ir y le perdonó la vida.


Las hadas del bosque

Un día soleado Marcos, Luca y Juan fueron al bosque de paseo. Allí se encontraron con un hada a la que le decían el hada Violeta porque siempre estaba vestida de violeta y todo lo que tocaba lo pintaba de ese color.
Después siguieron su recorrido y se encontraron con un hada verde que pintaba con sus alitas las hojas de los árboles y los sapos.
Siguieron el recorrido y se encontraron con un hada roja que con un pincel pintaba de rojo: flores, mariposas, bichitos...
Los chicos cansados, se sentaron en un viejo tronco y vieron que salió volando un hada azul y pintó el cielo y el río.
Se juntaron las cuatro hadas y saludaron a Marcos, Luca y Juan, pero antes de irse les pintaron los cachetes de violeta, verde, rojo y azul.



El parque limpio

Había una vez un niño llamado Darío, él le preguntó   a su mamá si podía ir a la casa de su tía. Ella vivía a  la vuelta de su casa, y él pasó por una vereda y al   frente había un lugar lleno de basura, él le preguntó a su tía si podía limpiar ese lugar y formarlo en un  parque; la tía le dijo que sí pero tenía que buscar   mucha  gente para que lo ayudaran.

Darío buscó a sus compañeros y maestras de la   escuela, su tía, a sus amigos y la mamá a sus    amigos del trabajo y decidieron limpiar el terreno    y   así quedó un lugar hermoso. 



La   princesa   rosario
 
Había   una  vez  una   niña  llamada  Rosario   y  era  una  encantadora  princesita  que  le  gustaba  ver  las  estrella  y  le  gastaba  leer  libros  y  poesía  y  también le  gastaba  enseñar  a los  niños. Vivían  con  su  mamá   en  un  castillo  que  es  rosa  y  el   techo  es  dorado.  Un  día   todos  los  niños  salían   de la   escuela     y   la   princesa   Rosario  se  quedó    a  guardar  las cosas  en  su  bolsa    pero  la   que  tenia  las  llaves   cerró  la   puerta  de  la   escuela   y   se  quedó   encerrada   y  su   mamá   estaba   muy   preocupada    por   la   princesita   de  repente  golpearon   un  vidrio   y   apareció  un  príncipe   que  se  llamaba   Eric  y  la   salvó  tirando una cuerda y la llevó hasta el castillo pero primero le avisó a su mamá para que se quedara tranquila y vivieran felices por siempre en el castillo del príncipe Eric.



 La  lechuza  linda

Había  una  vez  una  lechuza  y  ella  era  muy  linda  pero  los  otros animales  no  la  querían  pero una paloma  siempre  la  visitaba  cada  día
Y  ella  era  hermosa  y decía que le gustaba  pero  era  verdad  porque  la  paloma
sí le  gustaba.
10  años  más tarde la  paloma  y  la  lechuza  decidieron casarse.
Y  2  meses  después  tuvieron  hijitos  y  fueron  muy  felices.


La amiga de María

María tenía una amiga que se llamaba Clara. Siempre iban a jugar a su casa o iban a la plaza y comían cosas ricas. 
Clara fue un día a su casa y le dijo:
-María, no puedo jugar más con vos.
-¿Por qué no puedes jugar más?- contestó María,
-yo quiero estar sola- dijo Clara
-¿no recuerdas que éramos muy amigas?- dijo María.
María quedó muy triste y pensando:
-Parece que hay algo oculto en Clara, siempre estaba pálida y muy blanca.
Lo que tenía era una enfermedad muy contagiosa; su mamá no podía curarla con nada.
Pero la mamá de María la ayudó y la llevó al hospital.
La curaron y pudieron jugar juntas y felices.


   

 

2 comentarios:

Profe de Tecnología dijo...

Que lindo que están los cuentos, se nota que hay imaginación. Estaran leyendo mas esos niños...???

Anónimo dijo...

TE FELICITO STEFANÍA POR TU TRABAJO, GANAS , ENTUSISMO, ETC... CON LOS CHICOS Y POR LA CREACIÓN DE "RINCONCITO DE LUZ". ME SIENTO ORGULLOSA QUE TRASCIENDA EL TRABAJO QUE SE HACE EN LA DUPRAT. LAURA 4"B"